sábado, 18 de febrero de 2012

¿Otra vez cautivos y desarmados? 20120218

Un pueblo que ha sido capaz de indignarse porque sus archimillonarios deportistas de élite fueron objeto de chanza en un programa ¡de guiñoles! emitido por el Canal+ francés, bien podría sentirse aludido por la última reforma laboral que dinamita los derechos laborales, tumba el sistema de convenios, abarata el despido, facilita la reducción de los salarios y nos desplaza a través del tiempo hasta la feliz época de la postguerra. Dice la gente de orden que está feo mirar hacia atrás, despertar el pasado y todo eso, pero la derecha política está haciendo un magnífico ejercicio de memoria histórica. Sin complejos, claro.

Es normal que algunas personas se enfaden por el empeño de Eloy Suárez en cobrar sus trienios (¿no los cobran acaso otros políticos que son también funcionarios?), o que se mosqueen al ver que a Beamonte, presidente de la DPZ, también le gusta ir en coche oficial, o que alucinen al ver cómo el consejero Modesto Lobón nombra jefe de gabinete a su amiguete (que para colmo ha sido detenido por presuntas aficiones pedófilas). Pero tales incidencias, como diría un fiel votante del PP, no pasan de ser pecadillos veniales, cuando al mismo tiempo el presidente Rajoy suprime medio siglo de avances sociales y sus adláteres socavan con fruición la sanidad y la educación públicas. España está en recesión, la devaluación interna nos empobrecerá más y más, la desregulación alcanza el paroxismo, la UE se ha convertido en un deshueve neocón... ¡Qué me importa a mí si los gabachos se pitorrean de Nadal o de Casillas!

Para mañana han sido convocadas manifestaciones en toda España (salvo en Teruel, donde tienen el día medieval). Es de suponer que ahí se verá el estado de ánimo de las masas. Sería normal que además de salir a la calle, la izquierda oficial y la alternativa (tanto la sindical como la política) estuviesen trabando con toda urgencia un frente común destinado a frenar la ofensiva conservadora. Mas no ocurre así, cada cual está pendiente de lo suyo. Y una incógnita crucial flota en el ambiente: ¿otra vez cautivos y desarmados? Hay que ver lo fácilmente que nos han llevado esta vez al estado de shock.

JOSÉ LUIS Trasobares 18/02/2012

No hay comentarios:

Publicar un comentario