sábado, 30 de junio de 2012

Creo que me hace falta una dosis de relax 20120630

Será el calor, será la naturaleza de los acontecimientos que nos toca vivir, será que llevo mogollón de días seguidos dándole a la pianola... el caso es que ya me está pasando otra vez lo de siempre: me pongo al ordenador, ausculto la actualidad (más o menos), busco temas y de inmediato me va ganando una doble sensación. Por una parte me entra la risa histérica y por otra una especie de cabreo impropio de quien debe analizar objetivamente lo que sucede. O sea, que necesito unas vacaciones.

Cuando escribo estas líneas me estoy sometiendo a la mejor terapia posible: escucho el informativo vespertino de Aragón TV. Pues oigan, ni siquiera esa fina y templadita ducha de imparable optimismo, suave buenismo y aterciopelado positivismo me acaba de componer. Mala señal, muy mala. Oigo hablar a los consejeros del Gobierno aragonés, escucho la habitual ración de loas al Compromiso de Caspe (considerado hoy un adelantado ejercicio de consenso y sentido de Estado, cuando fue un acuerdo entre poderosos a espaldas del pueblo llano), aparecen los ministros del Gobierno de España echando su cuarto a espadas... y se me va la cabeza. Sólo me ha faltado el mano a mano entre Zapatero y el cardenal Cañizares. (con Iglesias llevando la custodia).

Ya no me hacen gracia los chistes sobre el apellido (Mato) de la ministra de Sanidad. Tampoco las cínicas bromas relativas a la posibilidad de que el medicamentazo y la paulatina devaluación de la sanidad pública devuelvan la sostenibilidad al sistema de pensiones al rebajar de manera acelerada la expectativa de vida de los españoles. Ni siquiera me emocionan el triunfal paseo de la selección de fútbol y las gloriosas expectativas que rodean al partido de mañana.

Ya sé que irse de viaje no es la solución. Admito asimismo que en este tórrido verano no habrá tregua ni reposo ni piedad. Es seguro que los grandes jefes (los políticos y los otros) aprovecharán la canícula para apretarnos (¡aún más!) las clavijas. Pero, amigos, yo me abro una temporadita. Vuelvo en un par de semanas (¡qué remedio!). No me olviden

viernes, 29 de junio de 2012

No hace falta consenso sino ruptura 20120629

Ha dicho Rubalcaba que Rajoy hace ahora lo que él ya propuso durante la campaña electoral. Impresionante, ¿no? El actual secretario general del PSOE ha decidido combinar una línea de entendimiento y apoyo al Gobierno conservador con algunas discrepancias relativas a los ajustes y al coste social de la crisis. En líneas generales, la convergencia (en intereses y en visión) de los partidos mayoritarios es notoria aunque no sea absoluta. PP y PSOE, a la postre, son los dos grandes ejes políticos de este Sistema. Ambos tienen mucho que callar, mucho que esconder, muchos muertos en sus armarios y muy pocas ganas de darle la vuelta a la situación. No hay Gobierno de Concentración ni creo que lo haya, pero se están sentando las bases de algunos consensos. Por eso, y descendiendo al plano más doméstico, Lambán no acaba de construir una discurso de oposición a Rudi y la que le hace Suárez a Belloch es simple pirotecnia elemental.

Leo en este diario artículos que reclaman un acuerdo entre conservadores y socialistas. Joan Tapia o mi buen amigo Luis Ángel Rioja insisten en ello. Pero no acabo de ver la cosa. ¿Un pacto para qué? ¿Para asumir la ortodoxia conservadora en materia presupuestaria y fiscal? ¿Para darle cuerda a un Sistema fracasado y en ruinas? ¿Para salvar bancos inviables y mantener ocultas las fechorías de los malabaristas financieros? ¿Para repartirse los poderes del Estado? Porque esto es lo que nos ponen hoy sobre la mesa.

España arrastra una democracia que se devalúa por momentos (el Parlamento no funciona, el Gobierno no comparece, el Poder Judicial es un fantasma, los reguladores económicos están acabados) y es preciso avanzar hacia una Segunda Transición que recupere lo mejor de la primera. Y de la misma manera que entonces se planteó una cuestión esencial (o continuidad del franquismo o reforma democrática) ahora hay que resolver la contradicción entre la verdadera democracia social y este sucedáneo corrompido y arruinado que padecemos.

Servidor prefiere ruptura a consenso. Giro radical. Y esta vez que vayan a la cárcel quienes lo merezcan. 

jueves, 28 de junio de 2012

Plan de negocio... ¡Pues menudo plan! 20120628

De inmediato, el Gobierno tendrá que echarles a las concesionarias de las autopistas de última generación, buena parte de los cuatrocientos y pico millones que pretende ahorrar dejando a los pensionistas sin sus medicinas más básicas (siempre les quedará la tila, como avisa la ministra). ¿Y cómo puede ser que las citadas autopistas (en su mayor parte radiales desde Madrid) hayan generado un agujero de casi cuatro mil millones de euros y sus actuales ingresos apenas cubran el pago de los intereses correspondientes a tal cantidad? Pues miren ustedes, porque falló el plan de negocio. Resulta que se calcularon unos gastos que al final casi se duplicaron (algunas de las infraestructuras en cuestión acabaron con espectaculares sobrecostes) y se presumieron unos ingresos que se han quedado en menos de la mitad. El tinglado es manifiestamente insostenible, pero habrá que darle cuerda con el dinero que se pueda rapiñar a los abuelos achacosos. Es genial (y repugnante).

Bueno, lo cierto es que esas autopistas quebradas fueron financiadas por agrupaciones de bancos y cajas que metieron allí cientos y aun miles de millones. Consultoras y técnicos elaboraron proyecciones, expertos de las entidades financieras dieron el OK, las instituciones bendijeron el cacao, corrió el dinero, se cobraron comisiones... Ahora habremos de escotar para pagar aquella fiesta.

En los años de las vacas gordas se vieron algunos planes de negocio delirantes. El referido a Motorland, por ejemplo, era pura fantasía y sus previsiones no se han cumplido ni se cumplirán jamás. Las evaluaciones previas que llevaron al Ministerio de Fomento a construir el aeropuerto de Huesca fueron igualmente quiméricas. La Expo de Zaragoza o el fracasado desarrollo del barrio del AVE ni les cuento.

Pero la rueda sigue girando. Los hombres de Adelson buscan cuatro mil millones para financiar su Eurovegas. Han hablado, dicen, con bancos españoles. Echémonos a temblar.

Que cuatro listos hagan su negocio y los demás carguemos con la ruina subsiguiente no es plan. Algún día habrá que poner fin a este cachondeo. 

miércoles, 27 de junio de 2012

Un país patético, desnortado, surrealista... 20120627

Cada día la cosa está más chunga... y más graciosa si uno se maneja en clave de humor negro. No habría rescate, pero lo hemos pedido. No habría banco malo, pero Guindos lo da por hecho. No dejaremos que nos pongan condiciones, pero ya prepara Rajoy una nueva tanda de putadicas para cumplir las instrucciones recibidas. El lunes oí en directo a Soraya Sáenz de Santamaría asegurar impertérrita su grandísimo interés por la agencia Efe, la misma a la que el Gobierno está desguazando fría y premeditadamente. La ministra de Sanidad recomienda remedios caseros. Han suspendido por todo el morro el debate sobre el estado de la Nación, que ya es el colmo. Y mientras nuestra democracia cae en los mercados al mismo ritmo que sube la prima de riesgo, es imposible distinguir a dónde va este país, qué objetivos persigue, cuáles son sus alternativas a la monumental estafa que llamamos crisis.

Como paradigma del imparable delirio, tenemos esa presunta operación destinada a montar en España una réplica de Las Vegas y Macao. Cada vez que Sheldon Adelson o sus ejecutivos se pasean por Madrid o Barcelona recibiendo reverencias y vendiendo humo alucino incluso más que cuando aterrizaron en Aragón aquellos de Gran Scala y se metieron en el bolsillo a nuestros jefes (los políticos y los otros). Pese a lo cual la jugada es la misma. La que nos comimos aquí como perfectos capullos (u otra cosa peor) la ejecutaron unos piernas. La que se desarrolla ahora es su versión perfeccionada: cuenta con sólidos amarres políticos (el tal Adelson financia regularmente al ala más del Partido Republicano USA), ha sido guiada en su desembarco por destacados elementos del lobi judío en España (incluso por el ubicuo Alejandro Agag, yerno de Aznar) y por lo demás es perfectamente inconcreta, oscura y fantasiosa. Por supuesto el promotor de Eurovegas no piensa poner un euro (sus portavoces ya hablan de que "buscarán financiación"), no tiene un proyecto definido, no cumple los plazos que él mismo anuncia, ni siquiera esconde que lo suyo es un obvio negocio de expectativa... Patético. 

martes, 26 de junio de 2012

Periodismo, un oficio en peligro de extinción 20120626

La semana pasada estuve en la presentación en Zaragoza del libro Yo muero hoy. En él la periodista Olga Rodríguez viaja al interior de las revoluciones árabes (singularmente de la egipcia) para poner nombre y rostro a los activistas, sindicalistas, blogueros y gentes que las hicieron posible. Es una historia contada desde abajo, desde la calle, que explica el cómo y el por qué de aquellos acontecimientos con precisión... y con emoción. 

Pero hubo ración doble porque al mismo tiempo que Olga hablaba en el Teatro Principal de su experiencia y su trabajo, en el Centro Pignatelli, otra colega, Mónica Bernabé, hacía lo propio con otro libro sobre la mesa: Afganistán, crónica de una ficción. Luego, ambas dos autoras y algunos amigos nos reunimos bajo la advocación de la Fundación María Domínguez y tuvimos ocasión de hablar de la vida, de la actualidad y de esta profesión nuestra que no sabemos dónde acabará.

Los libros de Rodríguez y Bernabé son periodismo puro, porque en ellos se sublima el principio de que la actualidad debe ser desmontada ante los ojos de la opinión pública para detectar las claves de lo que ocurre y sacar a la luz aquello que los poderes pretenden mantener oculto. Este oficio nuestro está sometido hoy al azote de la crisis, el desempleo, la precariedad y la explotación, así como a una terrible pérdida de independencia. Por eso los debates sobre soportes, herramientas y lenguajes son puro artificio. La clave está en los contenidos, en los objetivos, en la intención.

El periodismo implica investigación, análisis, profundización en los hechos aparentes y en los secretos premeditados. Sus profesionales no son independientes porque se mantengan en una imposible posición neutral o se ciñan a lo políticamente correcto, sino por su capacidad para llegar al fondo de cada asunto más allá de las versiones oficiales y por su compromiso con los valores ciudadanos: la libertad, la justicia social, la verdad.

Éste es un oficio en peligro de extinción. Pero creo que aún tendrá aliento para levantarse, hacer acopio de voluntad y seguir adelante. No sabemos ni queremos hacer otra cosa.

lunes, 25 de junio de 2012

Navegando en el charco de la mosca negra 20120625

Los zaragozanos están acojonadicos con la mosca negra. El agresivo díptero ha dejado las riberas del Ebro para internarse por el resto de la ciudad, donde muerde con saña. Las farmacias no dan a basto despachando pomadas y pastillas, corticoides, antihistamínicos y remedios contra el picor. 

Científicos, ecologistas y cualquier persona con sentido común se están haciendo a la idea de lo que pasa. La mosca negra, ciertamente, es un bicho muy borde capaz de colonizar nuevos territorios y hacerse fuerte en ellos. En el Ebro hay ya de todo: siluros, mejillones cebra, caracoles chinos, cangrejos americanos, mosquitos tigre... Pero, claro, si además de eso creamos en medio de Zaragoza un megacharco de aguas quietas y bien cargaditas de nitratos, si la vegetación acuática crece como nunca y los pececitos no pueden vivir por falta de oxígeno, pues parece normal que los peores insectos disfruten allí de la buena vida, nazcan, crezcan, se reproduzcan y mueran, dejando por el camino un rastro de ronchas, ayes y visitas a los servicios de urgencia.

Es verdad que este año no hubo que dragar el río y los famosos ebrobuses van y vienen mejor que nunca. Pero eso ha sido así no porque se haya cumplido ninguna profecía del alcalde Belloch y su consejero Blasco, sino porque no hubo crecida, la corriente apenas se aceleró y por lo tanto no hubo arrastre de gravas ni efecto Venturi ni ninguno de esos fenómenos tan molestos. A cambio, la mosca negra encontró un cado fenomenal justo en medio del lugar donde se aglomeran setecientas mil víctimas potenciales de sus picotazos. A huevo.

Vayan ustedes al Puente de Piedra y contemplen cómo las plantas acuáticas se extienden por la superficie del Ebro. Son ya tan tupidas que aprisionan cualquier cosa que traigan perezosamente las aguas retenidas. Por ese absurdo charco sucio navegan los ebrobuses que nos dejó la Expo como recuerdo. ¿Sostenibilidad, dicen ustedes? Sí, ése fue el lema del 2008. Desde entonces nos hemos esforzado mucho para sostener los barquitos y la mosca negra. Bateaux mouches, oye, como en París. 

domingo, 24 de junio de 2012

¡Si solo hubiera sido Zapatero...! 20120623

La presidenta del Gobierno aragonés, Luisa Fernanda Rudi, ha explicado de forma muy sencilla la crisis del sistema financiero español: todita la culpa fue de Zapatero. ¿Acaso no decía, el muy zote, que teníamos la mejor banca del mundo? Pues mira ahora. Y menos mal que tenemos a Guindos para cambalachear el rescate con la UE, la Troika y la mamá que los parió. Si no, a saber qué hubiera sido de nosotros.

Bueno, la verdad es que Zapatero y su partido son un magnífico consuelo para la derecha. Sumando despiste ideológico, oportunismo estratégico y estupidez táctica, el baranda sociata y su peña de amiguísimos, amigos y amiguetes se las apañaron primero para coexistir alegremente con las burbujas (la inmobiliaria, la financiera y todas las demás), luego para ignorar su estallido y finalmente para hundirse en la impotencia y el descrédito mientras esperaban que pasara la mala racha y viniese otro ciclo bueno. Lo cual explica que el PSOE haya salido muy tocado de este envite y ahora mismo no pueda recuperar el terreno perdido ni beneficiarse del rápido desgaste del PP.

Pero Zapatero no gobernó en toda España ni manejó todos los resortes de la economía ni tomó todas las decisiones erróneas. Y desde luego no es el culpable, por ejemplo, de que Aragón lleve un año desgobernado, con unas Cortes que no legislan y un Ejecutivo que va minando los servicios públicos y hunde en la indigencia a los grupos sociales más vulnerables. Eso corre de cuenta de Rudi.

Zapatero fue el jefe de Griñán y Barreda pero no el de Camps y Matas. Y desde luego no ha tenido mucho que ver con la confusión reinante durante estos seis meses en el presunto equipo de Mariano Rajoy, cuya capacidad para embrollarse, contradecirse y hacer el ridículo supera todos los records (y mira que las marcas estaban altas).

Por otra parte, justificar las torpezas de aquel con las memeces de este (o viceversa) carece de sentido. España está sumida en una crisis estructural que afecta a todo el sistema, incluidos los dos partidos mayoritarios y sus dirigentes. Zapatero, como Rudi, son parte del mismo problema. 

viernes, 22 de junio de 2012

Los que mecen la cuna (y se hacen ricos) 20120622

Hay detalles muy cucos en esta locura que nos envuelve. Por una parte tenemos el hecho de que los altos ejecutivos españoles (pongamos, por ejemplo, los de las empresas que cotizan en el Ibex) son los mejor pagados de Europa y perciben emolumentos por encima de sus homólogos de países mucho más ricos. Por otra, nuestras escuelas de negocios aparecen en los ránkings al uso entre las mejores del mundo. Lo cual plantea de inmediato una reflexión: si los que manejan los bancos y grandes compañías de este país son tan listos, están tan bien preparados y ganan pasta sin talento, ¿por qué estamos como estamos? Qué diablos ha fallado aquí.

La evolución de los acontecimientos en diversos ámbitos de la actividad económica ha sido muy similar. Durante la década de los Noventa, los métodos de gestión fueron objeto de vertiginosos cambios que desterraron la lógica, la prudencia, la sostenibilidad, la ética, la experiencia y el trabajo en equipo por una especie de vamos a llevarnos el mundo por delante y el último que apague la luz. Se inflaron artificiosamente los beneficios, jugando con fuego, fundiendo las reservas, tirando de crédito, iniciando a lo loco nuevas y disparatadas actividades, buscando ganancias astronómicas... Se desencadenó entonces una ráfaga de dinero aparentemente fácil y los altos directivos, repletos de autoestima, se premiaron a sí mismos con sueldos de futbolista más bonus, stock options, comisiones, blindajes y fondos de pensiones. Lo cierto es que cuando el reventón de las burbujas puso los puntos sobre las íes y la ingeniería financiera (incluida la manipulación de los balances) no dio más de sí, estos personajes ya eran multimillonarios y flotaban en el éter. Sólo les quedaba darse media vuelta, retabillar los últimos euros y largarse tan felices como el caballo de Atila tras una buena galopada. Algunos de ellos aún andan por ahí, ludópatas perdidos, inventando mayores delirios, apostando al límite... ¡Ah! y explicándole al respetable que España necesita mucha reforma, mucho trabajo y mucho sacrificio (por parte de los demás, se entiende). Qué listos, los muy bordes

jueves, 21 de junio de 2012

No todos somos culpables 20120621

La crisis se está llenando de leyendas. Según algunos relatos, se nos expulsó del Paraíso de la abundancia porque todos estiramos el brazo más que la manga, todos gastamos más de lo que ganábamos, todos quisimos vivir a la sopa boba sangrando al Estado, todos especulamos... Y ese todos se convierte en un ente definitivamente colectivo cuando se señala al gasto público (y por tanto la deuda pública) como causante esencial del desastre. A partir de ahí emergen los malditismos al uso: malditos políticos, malditas autonomías, malditas cajas de ahorro, malditos funcionarios... malditos pensionistas, inmigrantes, pobres de solemnidad, discapacitados, profesores, médicos, investigadores, mineros y asalariados en general. Un clamor que les cuadra muy bien a los reaccionarios pero no encaja en la realidad.

Los datos indican que no todos hemos sido culpables de esta crisis. Y si es cierto que hubo (y hay) políticos manirrotos, corruptos o simplemente estúpidos, ni siquiera es ése el problema principal. España arrastra una deuda privada muy superior a la de naturaleza pública (otra cosa es que las pérdidas del sector privado se estén trasladando al público a toda velocidad), y son los bancos (no sólo las cajas) los que deben lo que no está en los escritos por culpa de la maldita burbuja inmobiliaria.

Este mismo lunes, cuando aparecieron las últimas cifras referidas a la morosidad que sufre el sistema financiero, pudo comprobarse de qué va la fiesta. Los fallidos están en el 8,72%, vale. Pero, ojo, de 642.602 millones comprometido en hipotecas a particulares, la mora sólo llega al 3.07%, 19.938 millones. Mientras, los impagados de promotores y constructores son del 22,8% sobre un débito total de 295.696 millones, o sea 67.421 millones. Curioso, ¿verdad? Resulta que quienes se entramparon para comprarse un piso donde vivir aguantan muchísimo mejor que quienes estaban en el negocio del suelo y el ladrillo. No todos somos iguales.

Por eso, dejémonos de cuentos y busquemos la verdad. Hay culpables. Ya que nos han arruinado, al menos que no se nos rían en la cara

miércoles, 20 de junio de 2012

Algún día tendrán que ir juntos, ¿no? 20120620

Ayer salieron en manifestación los de la CNT, que siempre van a su bola. Para hoy han convocado CCOO y UGT. El sábado les toca a las mareas, las asociaciones de vecinos, los sindicatos minoritarios (CGT, OSTA y no sé si alguno más) y el 15-M. En unos u otros actos aparecerán los partidos y fuerzas políticas progresistas (a las que se ha sumado el PSOE, cuyos barandas han pasado del coche oficial a la pancarta en un plisplás). En suma, una verbena abigarrada, variopinta, dividida... las izquierdas, ya se sabe.

La movilización popular contra los recortes se viene produciendo en varios planos. De una parte están las acciones defensivas que lanzan los sectores conforme cada uno de ellos se ve afectado por la brutal ofensiva contra el Estado del bienestar. Profesores, estudiantes, padres de alumnos, sanitarios, desempleados, víctimas de EREs, desahuciados, mineros del carbón, discapacitados, universitarios... cada colectivo monta su propia plataforma y su propio calendario. Ahí, en los ámbitos perjudicados, pueden coincidir a veces las siglas, como pasó en la última jornada de lucha en la enseñanza cuando todos los sindicatos, estudiantes y las asociaciones de padres fueron al unísono. Pero después cada organización política, sindical o social defiende celosamente su personalidad. ¿Unidad? ¿Qué es eso?

La división, es verdad, viene de lejos. Sin embargo los acontecimientos presentes imponen una lógica bien distinta. Partidos, sindicatos y asociaciones (incluido el 15-M) deberían estar montando un organismo conjunto en el que, asimismo, se coordinasen los movimientos sectoriales. Ésta es una lucha política que requiere instrumentos políticos, unidad, generosidad, empatía y programas alternativos. Todo el viejo y roñoso sectarismo de las izquierda (y sus sucedáneos), todos los desencuentros, todos los malos rollos, todas esas frases cliché (incomprensibles para la gente de la calle) con las que unos y otros justifican su unilateralismo ya no tienen sentido. Ahora el desafío es tan enorme que solo cabe afrontarlo conjuntamente. Aunque sólo sea por una vez y no sirva de precedente.

martes, 19 de junio de 2012

...y el Sultán se adueñó de Constantinopla 20120619

Los griegos votaron como les habían mandado. No parece haberles servido de nada. Y a nosotros, tampoco. Qué decepción. Yo me las prometía muy felices el domingo cuando salí de paseo. «Zaragoza vuelve a la Edad Media», decían los reclamos. Hombre, pensé yo, retroceder hasta la era de la oscuridad parece excesivo; con regresar a los años Sesenta del siglo pasado ya tendríamos bastante, ¿no?. Mas por si acaso fui al mercado de época y presté mucha atención a los chamarileros, vendedores de quesos y dulces, halconeros, forjadores de espadas y corazas... en fin, a ver si encontraba algún nicho para sobrevivir en ese futuro que llega desde el pasado. Acabé en El Juanico tomándome una caña y una gamba con gabardina. Algo es algo. 

El paseíllo medieval y las elecciones en Grecia me llevaron a recordar la caída de Bizancio, la toma de Constantinopla por el Sultán Mehmet II. Un poco rebuscado, lo reconozco. Pero se da el caso de que a mediados del siglo XV los griegos de entonces, últimos súbditos del Imperio Romano de Oriente, estaban a punto de caer en las garras del agresivo Sultán otomano. El Basileo bizantino marchó a Roma a pedir ayuda para su ciudad cercada. El Papa y los reyes de Occidente le dijeron que sólo le echarían una mano si la Iglesia Ortodoxa renunciaba a la herejía y se subordinaba a la Católica. El emperador Constantino XI, qué remedio, aceptó. Mas al saberse aquello en Constantinopla muchos se rebelaron. ¿Por qué acceder a las exigencias de los odiados latinos?, se preguntaban. ¿Quién nos garantiza que cumplirán sus promesas? Así, divididos y angustiados, los ultimos bizantinos se aprestaron a defender las murallas de Constantinopla. Nadie les ayudó. Venecia retrasó los socorros. Génova jugó un papel equívoco y sólo algunos de sus hombres de armas echaron una mano en los últimos combates. El Rey de Aragón andaba en otros asuntos. El Papa mandó cuatro barcos con trigo y armas y de él nunca más se supo. Mehmet tomó la ciudad al asalto. Los jenízaros no tuvieron piedad. Y eso que todavía no se había inventado la prima de riesgo.

lunes, 18 de junio de 2012

Lo que es y lo que no es 20120618

Acabé la semana pasada agobiado con todo lo que se nos venía encima. La OCDE reclamaba la jubilación a los setenta. El FMI exigía una inmediata subida del IVA, nuevas bajadas del sueldo de los funcionarios y la aceleración de lo que los ortodoxos llaman, pudorosamente, reformas. Desde todos los ángulos llovían recomendaciones terroríficas. En España, el ministro Gallardón, supuesto adalid del centrismo, advertía de que hemos de prepararnos para currar los trescientos sesenta y cinco días del año, que está muy relajado y muy vago el obrerío. Y aquí el Gobierno (o como quieran llamarlo) de la señora Rudi y el Gobierno municipal (o lo que sea) del señor Belloch anunciaban más recortes, subidas, ajustes, apretones, putadas.

Toda la artillería apunta contra la capacidad adquisitiva de los trabajadores y las clases medias, y contra los servicios y el sector público en su conjunto. No se oye ni media palabra sobre la reforma del sector financiero (para ponerlo en orden, regularlo, controlarlo y disciplinar a sus gestores) ni sobre los cambios imprescindibles en la ordenación urbanística (para cortar por lo sano con la especulación y fijar una banda de precios justos y razonables) ni sobre la transformación del modelo económico ni sobre nada que afronte la crisis como lo que es, el producto de un Sistema perfectamente podrido e insostenible.

Se sigue hablando de organizar olimpiadas y campeonatos, de urbanizar los últimos metros de playa virgen o de construir más viviendas en el destierro de Arcosur (ya me perdonarán los arqueros, pero las cosas son como son). Madrid y Barcelona se pelean por Eurovegas (el tal Adelson se debe deshuevar de semejantes primaveras). Y para disimular el Príncipe de Asturias ha comunicado que este verano renuncia a las regatas. Qué majo.

Cada día, este delirio es comentado con creciente ironía por los medios de comunicación extranjeros. El New York Times ha explicado que la crisis española no es tanto consecuencia del gasto público como del estallido de la burbuja inmobiliaria y su impacto sobre una Banca sobreexpuesta. Pero nada... que si quieres arroz, Cospedal.

domingo, 17 de junio de 2012

Rudi, como Iglesias... pero sin dinero y en plan hueso 20120617

Lo malo del circo institucional aragonés es que no se supo gastar cuando había dinero y tampoco se sabe ahorrar, ahora que vienen las vacas flacas. El origen del problema es el mismo: no se sabe cuál es nuestra meta, a dónde vamos, qué queremos ser de mayores. Carentes de auténticos planes a medio y largo plazo (que no sean las rutinas habituales como la improbable Travesía Central del Pirineo, los inútiles pantanos y la inalcanzable recuperación de la construcción de viviendas como motor de la economía), los jefes viven a salto de mata. A la postre, Luisa Fernanda Rudi no deja ser una especie de Marcelino Iglesias, sólo que sin dinero y sin el buen rollito que se gastaba éste. Desde luego el que fuera prudente presidente jamás se hubiera metido a pisar los callos de Aragón entero con la indiferencia y la inconsciencia que se gasta la actual doña.

La ceguera estratégica se percibe en el conservadurismo barato de los dirigentes empresariales, en la perfecta mediocridad de los líderes sindicales y en personajes como el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, que lleva lustros con los ojos vendados tirando pelotazos a las cucañas y a ver si llueven caramelos. La evidencia de hasta qué punto caminamos sin rumbo está en el papel del PAR como hilo conductor de una era marcada por el oportunismo y las martingalas.

No hay pasta, digo. Normal, si tenemos en cuenta el desmadre habido y por haber. Vean la factura de los últimos días: dinero para tapar el agujero de PlaZa, dinero para hacer lo propio con el ídem de Aramón, diez millones de euros que ha costado el plan Red sin echar un solo de gramo de asfalto sobre carretera alguna (y el actual diputado regionalista Antonio Ruspira, padre del susodicho plan, viendo tranquilamente los toros desde la barrera), otros siete millones que han de irse en indemnizaciones a La Ambulancia Azul por irregularidades en la adjudicación de servicios que perjudicó a dicha empresa en beneficio de Ambuibérica (un tema feo donde los haya que los tribunales han zanjado condenando al Gobierno aragonés), una cantidad indeterminada (pero enorme) que va por cuenta del fracaso del cacareado plan de depuradoras (otro asunto PAR)... Por supuesto son temas que vienen coleando desde legislaturas anteriores, pero en todos ellos el PP o sus coaligados del Partido Aragónes tuvieron que ver en el pasado y siguen teniendo que ver en el presente. ¡Pero si el anterior responsable máximo de Aramón, Francisco Bono, es ahora consejero de Economía del Ejecutivo autónomo!

Así andamos, de la sartén al fuego. Eso sí, vamos a recortar en educación, en Universidad, en sanidad, en servicios sociales. ¡Y encima ésta es una de las comunidades españolas que más apañadas tiene las cuentas! Dan ganas de echar a correr.

sábado, 16 de junio de 2012

Leña al discapacitado, que es el más débil 20120616

Cabe suponer que para muchas personas de orden los discapacitados son carne de caridad y cuestación, pobrecitos. Y van a serlo si el actual Gobierno de Aragón continúa con su programa destructor. Las organizaciones que trabajan en tan peliagudo sector manteniendo residencias y centros de día, impulsando centros especiales de empleo o ayudando a las familias no sólo ven cómo se recortan drásticamente las subvenciones y los programas, también padecen alarmantes retrasos en el pago de los conciertos con el IASS y de las ayudas que preceptivamente debe abonarles el Inaem. Tras las buenas palabras de hace un año, cuando los del PP llegaron al Pignatellí poniendo caritas angelicales, ha llegado la hora de la verdad y el corderillo de ayer se ha convertido en un lobo carnicero. La regla de tres es simple: si esta Administración, presidida por Luisa Fernanda Rudi, es capaz de barrenar la educación pública, asfixiar la Universidad o devaluar la sanidad, ¿por qué no habría de pasar por encima de los discapacitados, que a la postre son los más débiles de todo el entramado social? Si estos gobiernos de la derecha se atreven con los mineros, gentes correosas y luchadoras donde las haya, ¿qué no harán con aquellas personas que ni siquiera pueden valerse por sí mismas?

En el caso de que las fundaciones y asociaciones activas en el sector de la discapacidad (intelectual, física o sensorial) desaparezcan o deban volver a la época en que dependían del altruismo ajeno, la pérdida será terrible. Y ello no sólo atañe a los directamente afectados. Toda la sociedad se empobrecerá. Todos seremos más miserables, más desgraciados, más vulnerables, más injustos, menos libres.

El PP, cuando estaba en la oposición (y parece que fue ayer), pretendía mejorar la calidad de la asistencia prestada a los discapacitadas, observaba el sector con mirada crítica, buscaba (y a menudo inventaba) sus fallos. No explicaba entonces su alternativa: hundir lo construido durante el último medio siglo y, oye, si alguien quiere algo, que salga con huchas a la calle. Pues vale... A la calle saldrán. Pero no con huchas precisamente


viernes, 15 de junio de 2012

Guirigay, polvos, lodos y el 'boomerang' 20120615

Cuando escribo estas líneas salta al campo la Selección Española de Fútbol, y tengo la impresión de que la eventual victoria de nuestros futbolistas es la única salida inmediata que les queda a las gentes del sistema, empezando por el ínclito presidente Rajoy. Porque todo lo demás está patas arriba, total y definitivamente. Peor aún: el guirigay de declaraciones diarias en Madrid, Bruselas y Berlín refleja no sólo la gravedad de la situación sino el pitorreo que se traen entre manos nuestros supuestos líderes. Desde el sábado pasado, cuando Marianico El Listo salió presumiendo de chulo (luego incluso recibiría, junto a Guindos, la felicitación del Rey), hasta el cierre de los mercados en la tarde de ayer con el bono español batiendo récords, se han sucedido las declaraciones contradictorias, los enfados, las mentiras, las distracciones, los chantajes y las putadas. Ya no queda otro alivio que ganar la Eurocopa.

Es curioso comprobar cómo el PP recibe ahora el impacto de los boomerang que lanzó con toda su alma durante los años de oposición. Aquellos polvetes retóricos son hoy peligrosos lodos. Los coches oficiales y sus chóferes, los asesores, el amiguismo, la frivolité... todas las prebendas del poder y todos los efectos de la crisis llegan ahora, cortando el aire. ¿Van a pie los jefes de la derecha? ¿Han renunciado a colocar a sus próximos a costa del contribuyente? ¿Ya no están rodeados de una espesa nube de asistentes, consejeros y expertos? ¿Se ha encendido la luz mostrando el final del túnel o es el faro de una locomotora que carga sobre nosotros? ¿Y la confianza que íbamos a transmitir a los mercados? ¿Y el apoyo de la Europa conservadora? ¿Y el maravilloso efecto de las reformas? ¡Ay, amigos, qué bien se vivía contra Zapatero y qué jorobada está la cosa ahora mismo!

Los gobiernos (el de España como el de Aragón) van de cráneo. No entienden por qué no se abre para ellos la puerta de salida ni por qué la ciudadanía les protesta los recortes. Lo pasan mal (véase la carica con la que fue Rudi a entrevistarse con los mineros). Pero, mira, España acaba de meterle un gol a Irlanda. Alabado sea Dios.

jueves, 14 de junio de 2012

Al 'cole' con la comida en el 'tupper' 20120614

Salió en los telediarios que en algunas escuelas públicas españolas, eliminadas las ayudas a los comedores y reducidas al mínimo las becas, los críos van a clase llevándose la comida en fiambrera o, si lo prefieren, en tupper, que resulta más aparente. Queda la duda de si los colegios tendrán frigoríficos y microondas para guardar y calentar los macarrones o la pechuga empanada. Tampoco se sabe quién correrá con la responsabilidad de organizar el picnic. ¿Y si las familias no disponen de recursos suficientes para preparles a los chavales un almuerzo en condiciones?

Jamás pensé que vería cosas como ésta. Claro que tampoco entraba en mis previsiones (y mira que se me da bien la bola de cristal) ser testigo del constante retroceso en la edad de jubilación (la OCDE sugiere ya los setenta años) o contemplar alucinado cómo los agentes de la oligarquía financiera nos levantaban primero la pasta, a medias con los cárteles inmobiliarios, y luego se abrían forrados hasta los tuétanos, dejando tras de sí un gigantesco agujero que los contribuyentes habremos de rellenar a escote. Pertenezco a una generación y a un grupo de personas que contempló con algún escepticismo el desenlace de la Transición y que luego se dejó llevar por un lúcido desencanto. Pero la perversión de la democracia que se viene produciendo en este país no entraba en ninguna de mis previsiones. 

Tras años pugnando en pro o en contra de la memoria, resulta que la historia vuelve sobre sus pasos, nos alcanza y nos desborda. Los amnésicos alucinan ahora al ver cómo se las gastan los mineros asturianos (incluso los aragoneses, que tampoco son mancos). Pero la gente precavida sabe que esos mineros son nietos o biznietos de aquellos que, cuando se alzaban en defensa de su dignidad proletaria, tomaban la fábrica de armas de Trubia y luego asaltaban los cuarteles de la Guardia Civil. ¿O cómo se creen ustedes que lograron vender lo más caro posible su infravida en las galerias, su silicosis o su sistemático flirteo con el grisú y los derrumbamientos?

¡Ay, esos niños con la comida en la fiambrera! ¿Qué vendrá luego?

miércoles, 13 de junio de 2012

¡Cómo que nadie vio venir la crisis! 20120613

La crisis global, sus causas y sus matices locales sí fueron adivinados y avisados antes del 2007. Lo de que nadie advirtió la amenaza es mentira podrida. Eso sí, los augures del desastre fueron desterrados a la periferia del Sistema, silenciados o tratados de agoreros, cenizos y miserables. Y en el colmo de las paradojas quienes entonces cerraban ojos y oídos a toda prospectiva que no cuadrase con el España va bien (mantra de Aznar y de Zapatero) ahora se hacen de nuevas y muestran una furiosa indignación sobrevenida. Genial. Hay pobres de espíritu que rechazan hoy cualquier crítica a su Rajoy o su Rudi reprochándote que no anduvieses tan flamenco cuando mandaban los otros (¿?) o que no fueses capaz de detectar la burbuja inmobiliaria, la insostenibilidad de las más relucientes sociedades públicas aragonesas o el fracaso de los planes para reindustrializar las cuencas mineras turolenses. Qué poca memoria y qué flacas entendederas.

Hemos llegado hasta aquí atropellando la lucidez. Pero la cosa continúa. En Aragón y España entera ni se atendió a las voces que presagiaban la ruina actual ni se actúa hoy de manera correcta en la superación de esta verdadera tragedia social. Anteayer, por ejemplo, se oyó al consejero Bermúdez de Castro asegurar que la DGA luchará "con uñas y dientes" para mantener la actividad de Aramón, empresa semipública que arrastra (oficialmente) un agujero de 90 millones y solo en la última temporada ha perdido 22 millones. La novedad no radica en que la nieve se venga abajo, eso ya estaba claro hace años (véanlo en las hemerotecas); lo inaudito es que la voluntad luchadora de nuestro Gobierno autónomo se aplique al esquí y no a la sanidad, la educación, los servicios sociales, la investigación o, si me apuran, la minería. ¿Nos hemos vuelto locos?

Total que ahora hay que volver a lanzar elementales advertencias: el rescate de la banca lo vamos a pagar entre todos, el Gobierno aplicará nuevos y terribles recortes, los autores del desaguisado seguirán (multimillonarios perdidos) riéndose de todos, Rajoy destruirá el sector público... No digan luego que no se advirtió. 

martes, 12 de junio de 2012

Una vez más, quien fustiga consterna 20120612

La presidenta Rudi, tras reunirse a paso de carga con el socialista Lambán, la patronal y los sindicatos, concedió ayer una rueda de prensa (con preguntas, como debe ser) para pedir calma, unidad, resignación y arrepentimiento. No dijo nada concreto sobre cosa alguna, pero se le notaban las ganas de exorcizar los demonios de la crispación social. El arrebato del otro día contra la consejera de Educación y la posterior bronca que organizaron los mineros del carbón en La Aljafería (y luego en Teruel) han disparado las alarmas. La gente que manda en el PP aragonés venía a disfrutar del poder no a sufrir agobios. Se han asustado. Y eso que la cosa no ha hecho más que empezar.

Quien fustiga consterna. La contestación ciudadana contra los recortes va a desarrollarse en paralelo a los ajustes. Si estos aumentan, el cabreo popular también. Hasta hoy el civismo y el respeto a las reglas de juego han sido la tónica general de las sucesivas huelgas y manifestaciones. Pero esa normalidad en las protestas no se mantendrá indefinidamente. Habrá más incidentes, más insultos, más acosos a las mujeres y hombres públicos que deciden o permiten la destrucción del Estado de Bienestar. Habrá más consternación.

A la postre, Rudi sólo es una pieza en el engranaje y ni quiere ni puede hacer más de lo que hace. El sábado, su jefe, Mariano Rajoy, interpretó un nuevo y excepcional acto del sainete en que se está convirtiendo su mandato. Presumió de haberse puesto por montera a la Troika, aseguró que todo estaba resuelto... y se fue a ver el partido de la Roja. Qué majo. Pero ayer la prima de riesgo ascendió otra vez a los 520 puntos, y nadie duda de que esos cien mil millones destinados a rescatar a los bancos caerán a peso muerto sobre las espaldas de todos los españoles. Nuestro destino es la pobreza. La economía real cae a plomo (desde diciembre del 2007 la inversión en bienes de equipo ha bajado ¡un 61%!, segun datos del Ministerio de Economía). Se prevén nuevos e importantes retrocesos del PIB español. El empleo no se recupera.

Esto, queridas jefas, queridos jefes, no se zanja con buenas palabras (y oídos sordos). La ciudadanía arrastra demasiada consternación. 

lunes, 11 de junio de 2012

Más contradicciones (para que no se diga) 20120611

Por qué hace usted constantes y negativas alusiones al cristianismo en sus más críticos comentarios sobre la actualidad política?, me preguntan algunos lectores obviamente indignados. Hombre, respondo yo, pues porque la Iglesia (ya ven que la escribo con mayúscula) es en este país un evidente factor político. Los obispos han encabezado manifestaciones contra Zapatero. Los programas del PP se han basado (en lo que a cuestiones de derechos individuales se refiere) en las directrices de la jerarquía católica. El Concordato es una pieza excepcional (política, ¿no?) que otorga privilegios de todo tipo... ¿Entonces?

Pero sí es cierto que, en el terreno de las contradicciones que recorren las Españas, no sólo cabe situar la doble moral de personajes públicos de misa y comunión diarias (como el megajuez Dívar), sino también la doble condición de muchos dirigentes y cuadros de la izquierda oficial, cuyas acciones han derivado en algo muy poco coherente con su presunta vocación social.

Si estamos viendo a gentes que pregonan de día la doctrina de la Santa Madre Iglesia y por la noche se ponen el mundo por montera (a cuenta de la ciudadanía, si puede ser), también nos hemos hartado de contemplar cómo sedicentes socialistas, supuestos líderes sindicales y otros personajes autoetiquetados como progresistas se encamaban con los malabaristas de las finanzas y los traficantes de suelo, les daban la vuelta a sus propios programas, ponían el cazo y colaboraban por acción u omisión con el saqueo a que ha sido sometido este país. De hecho, una gran parte de la crisis de valores que se ha abatido sobre nosotros guarda relación directa con la incapacidad de la izquierda oficial (la llamo así para distinguirla de aquella otra que aún mantiene actitudes y planteamientos alternativos) para sostener una ética y una estética que pusieran en valor el sistema democrático. Si el PSOE (pero también UGT y CCOO) no hubieran transitado tantas veces desde el pragmatismo al abandono puro y simple del interés público, no estaríamos así.

Contradicción que describo (una vez más) para dejar las cosas claras... y para que no se diga. 

domingo, 10 de junio de 2012

¿Qué habéis hecho con nuestro dinero? 20120610

Los vascos, ¡oh, maravilla!, pueden describir con total precisión cuánto dinero les ha entrado procedente de los fondos europeos, en qué ha sido invertido y con qué resultados. En veinticinco años Euskadi ha mantenido un patrón fijo en la inversión de fondos públicos (de todos ellos) y el resultado final está a la vista: si a mediados de los Ochenta provincias como Vizcaya tenían una tasa de desempleo superior al 35%, ahora afrontan la crisis con un nivel de paro muy por debajo de la media española e integran la comunidad que dispone de una mayor y mejor economía productiva. Un tejido industrial potente e internacionalizado, un I+D+i de alto nivel, un movimiento cooperativo sin parangón, un sector de la construcción bajo control, un medio ambiente cuidado y protegido son otros tantos factores que marcan la diferencia con el resto de España.

¿Sabe alguna autoridad aragonesa cuánto han sumado las sucesivas partidas destinadas a reindustrializar las cuenca mineras turolenses? Seguro que no. Pero desde aquí les garantizo que la cantidad probable nos sorprendería por su volumen. No ha sido una bagatela, mas carecemos de una idea medio precisa sobre su impacto real. Lo cierto es que si ahora se cierran las minas de carbón (algo que por otra parte no carece de lógica) miles de personas van a quedarse sin empleo y el Bajo Aragón sufrirá un golpe fatal. ¿Qué ha sido de los muchos millones de pesetas y de euros enterrados en las más dispares iniciativas empresariales? ¿A dónde han ido a parar esas iniciativas?

Claro que cuando estaban agobiados por el desmantelamiento de la siderurgia y de otras industrias pesadas, los vascos aún eran capaces de definir qué sabían hacer, cuál era su punto fuerte. Disponían de una vocación fabril, de una mano de obra cualificada y de una voluntad encaminada a suplir el bache de los Ochenta con innovación y desarrollo científico-técnico. Por eso sus nuevas sociedades públicas se pusieron a trabajar en apoyo de la modernización empresarial, incluyendo en la apuesta conceptos como la sostenibilidad medioambiental, la responsabilidad social, la calidad homologada y la presencia en los mercados exteriores. ¡Ah!, y eso se hizo sistemáticamente bajo sucesivos gobiernos.

¿Qué sabemos hacer los aragoneses? ¿Qué queremos ser en el futuro? ¿Dónde están nuestras habilidades? ¿Cómo poner a trabajar nuestro territorio sin destruirlo? Ésas son las preguntas claves que deberíamos hacer cuando vemos al Bajo Aragón pendiente de un hilo, nos enteramos de que Aramón ha perdido veintidós millones sólo en la última temporada de esquí, dejamos que la Universidad pública se vaya derrumbando o rodeamos de indiferencia a nuestros escasos aunque activos investigadores.

Y la cuestión crucial ¿Qué ha sido de nuestro dinero?

sábado, 9 de junio de 2012

Santa Bárbara bendita, patrona de los mineros 20120609

Durante decenios hemos oído hablar de la reindustrialización de las cuencas mineras turolenses, el Plan Míner, el Fondo Especial de Teruel y otras acciones institucionales supuestamente destinadas a crear un nuevo tejido económico que diese el relevo al carbón. Pero ahora, cuando el Gobierno central se dispone a firmar el certificado de defunción de dicho sector, tres mil puestos de trabajo directos e indirectos están en peligro en el Bajo Aragón. Es el desastre definitivo, la ruina, el final de una época y de un territorio. Rudi guarda silencio. Biel pasa de largo. Los mineros están en pie de guerra. Y los diputados del PP y del PAR en las Cortes de Aragón abandonan el hemiciclo, en un inaudito acto de protesta por el mogollón que les montaron anteayer los condenados al paro.

En toda esta tragedia llama la atención esa hipersensibilidad de los parlamentarios de la mayoría, ofendidos por los bruscos modales y los insultos de los mineros (como la consejera de Educación, Dolores Serrat se ofendió días atrás por la bronca que le montaron varios defensores de la escuela pública). Es comprensible. A nadie le gusta pasar por experiencias desagradables. Pero habrían de tener en cuenta las promujeres y los prohombres de la derecha que las medidas que aplican (o dejan aplicar con terrible indiferencia) están causando enormes daños y perjuicios a miles de personas. Empobreciendo a la población o estrangulando los servicios públicos no se hacen amigos precisamente. Hay gente que está luchando por su futuro y el de su familia. Es lógico que alguno de ellos se extralimite. Esto es un tempestad y cada palo ha de aguantar su vela.

Las gentes de orden pueden creer que los mineros (y todos los demás perjudicados) tienen que aguantarse, poner buena cara y encomendarse a Santa Bárbara bendita, su patrona. Como hace la ministra de Empleo (o de Trabajo o de lo que sea), yéndose al Rocío a pedir la intercesión de la Virgen del ídem para acabar con el paro. Sin embargo, las personas humanas no están para bromas. Sufren, temen por su futuro, se agobian y, claro, se cabrean. La paz social, damas y caballeros, pende de un hilo. ¿Qué esperábamos?

viernes, 8 de junio de 2012

¡Que parezca un accidente! 20120608

Bueno, vamos avanzando. Ahora la clave está en que nos rescaten sin decir que nos rescatan, que nos intervengan sin pregonarlo. España, de hecho, baila desde hace tiempo al son que le tocan (la cosa empezó a rodar con Zapatero y ahora circula a toda velocidad), pero su actual Gobierno pretende disimular la situación. Los portavoces más voceras del PP han recuperado sin cortarse un pelo el discurso del PSOE: el problema no es del Estado sino de la Banca y la solución está en Europa. Que nos echen pues una mano (al cuello será) pero que no nos estigmaticen. Que nos asesinen pero que parezca un accidente.

Los gobernantes y barandas en general siempre intentarán sumirnos en una realidad percibida que ellos han modelado previamente. No les inquieta que las cosas sean como son, sino el relato que se haga de ellas. Rajoy quiere evitar la palabra intervención en los titulares, de la misma forma que en los medios públicos controlados por el PP se ha prohibido el uso del término recorte. Se pretende que las políticas de comunicación sustituyan a la política misma, que la clave de las medidas adoptadas no esté en su contenido sino en la forma de explicárselas al personal que las padece. Por eso el muy descarado abaratamiento del despido se ofrece como una forma de crear empleo, y la evidente destrucción del sector público nos es vendida como una manera de hacerlo más eficiente.

El problema es que mientras hacemos juegos de palabras, nos empobrecemos nosotros y nuestro entorno. La sanidad, la educación, la universidad, la investigación y la cultura se desploman en una voladura controlada fríamente ejecutada desde el poder. Se está dejando morir a las empresas sociales, a las organizaciones que realizan tareas asistenciales. Los pobres, los excluidos y los discapacitados van a ser abandonados a su suerte.

Todo lo cual no es un accidente sino un programa premeditado. Tal vez Rajoy ponga cara de apurado mientras hace lo que tiene que hacer y Rudi mantenga ese discurso suyo tan campanudo como vacío, pero Esperanza Aguirre está encantada de haberse conocido y eso parece... lo que es.

jueves, 7 de junio de 2012

Un país demasiado lleno de contradicciones 20120607

Todo Madrid (y media España) está al cabo de la calle respecto de las escapadas marbellíes del juez Dívar, presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo. En los mentideros cuentan y no paran sobre cuándo, cómo y con quién se gastó el personaje en cuestión esos miles de euros (una miseria, dijo él) cotizados a escote por los contribuyentes españoles. Hemos de suponer pues que los diputados del PP y de CiU sabían también del tema cuando rechazaron la comparecencia parlamentaria del primer magistrado del Reino. En una aparatosa contradicción, nuestros gobernantes (de España y de Cataluña) pretenden sostener el prestigio exterior y la autoestima del país por el procedimiento de dejar cada cagada (real o presunta, ojo) bien a la vista. Luego pasa lo que pasa.

El caballero Dívar encarna a su vez el evidente encontronazo entre una manera de estar conservadora, religiosa, cumplidora y muy remirada y una segunda personalidad apegada al lujo, a la molicie y a las amistades que no me atrevo a definir. Todo muy en la hidalga tradición española de rezar por la mañana, pecar por la noche y recibir la absolución al día siguiente sin perder un ápice de altanería.

Lo más perturbador es que ya no hay voluntad ni posibilidad de disimular estas contradicciones o al menos muchas de ellas. Los altísimos directivos de bancos, cajas y grandes compañías se lo han llevado crudo. Los políticos han mentido con fruición convirtiendo el incumplimiento de sus promesas en una especie de virtud coyuntural. Los medios han dejado de describir y controlar al Sistema para formar parte de él, lo que les ha llevado a la ruina económica. La opinión pública fue seducida con maravillas de cartón piedra y ahora choca brutalmente con una realidad durísima que le presentan sin edulcorante alguno, a lo bestia. En resumidas cuentas, se pretende que aplaudamos nuestro empobrecimiento, que admiremos y sigamos a quienes han originado el actual desastre, que votemos los recortes, la manipulación y la burricie. A cambio nos ofrecen la posibilidad de sobrevivir. Pero ésa, creo, no deja de ser otra contradicción. 

miércoles, 6 de junio de 2012

Sociedades ruinosas pero 'bienpagás' 20120606

Verdaderamente hay cosas que impresionan. Si leen ustedes la noticia de hoy sobre la rebaja de sueldo a los directivos de las sociedades públicas dependientes del Gobierno de Aragón, descubrirán que un primer recorte permitirá ahorrar (en este caso el término sí es correcto) 562.928 euros, y 686.928 euros cuando la medida se extienda a otros ejecutivos del sector. Y conste que no resulta tan impactante el dato en sí, como el hecho de que recortando en un 28% (de media) los emolumentos de estos profesionales bienpagaos (y nombrados a dedo) se obtenga un resultado tan notorio. Tendré que darles la razón a quienes solían advertir que en nuestra Administración autónoma los loros tragaban (y tragan) una barbaridad de chocolate.

Naturalmente, en las sociedades públicas se ganaban unos salarios realmente estupendos, destinados supuestamente a competir con los de la empresa privada. El baranda de Expoaragón Empresarial venía apaleando unos 120.000 euros anuales, que son 40.000 más de los que percibe su teórica jefa, la señora presidenta del Gobierno autónomo. El de Plaza se levantaba 110.000 euretes. El de Motorland, 100.000. Pero no se preocupen ustedes por ellos, que a pesar de la segada tampoco se quedarán en la miseria. Con ingresos que pasarán a oscilar entre los 80.000 y los 60.000 euros al año, seguirán ganando más pasta que cualquier consejero del Gobierno de Aragón. ¿Pero se la ganarán de verdad? Esta es la cuestión.

Porque más allá de los sueldos (sueldazos, quiero decir) está el problema central: ni una sola de las sociedades públicas ha cumplido su plan de negocios. Entre todas ellas acumulan en estos momentos un agujero impreciso pero que no bajará de los 600 millones (que no son chocolatinas precisamente). O sea que la gestión no parece haber sido exitosa en absoluto. ¿Se han pagado estos salarios competitivos para que sus perceptores ejecutasen descomunales ruinas?

Por lo cual ahora queda lo más molón y lo más jodido: frenar las tremebundas pérdidas de las sociedades públicas, ponerlas en orden, hacerlas sostenibles... o cesar a sus directivos. 

martes, 5 de junio de 2012

También los sinvergüenzas son escépticos 20120605

A poco de reventar la burbuja inmobiliaria, varias personas de orden y de dinero se reunieron a cenar en Zaragoza. El anfitrión, uno de los grandes constructores promotores del lugar, lamentó que su caja B, engrosada durante años por cientos de miles y millones (de euros, claro) cobrados en negro, debiera seguir oculta en cajas de seguridad sin poder socorrer a la ya temblorosa y semidesmayada economía patria. Días después, otro de los asistentes a la velada, conocido dirigente empresarial aragonés, lanzó desde su organización un comunicado instando al Gobierno a ofrecer una amnistía fiscal como forma de recapitalizar España. Se ve que las razones de su amigo, el traficante de suelo y vivienda, le habían motivado.

La amnistía ha llegado por fin. El actual Gobierno de España ha accedido a lavar por un módico diez por ciento el dinero negro que llegue a los bancos. No habrá que explicar su procedencia. Como dijo ayer en La Ventana mi colega y amigo Nicolás Espada, quienes robaron a las hermanas cistercienses aquel fajo de billetes ganado con tanto afán por la Monja Pintora podrán legalizar tranquilamente su botín llevándolo do corresponda en la misma bolsa de basura donde lo habían guardado sus anteriores propietarias. No obstante, los entendidos aseguran que apenas aflorará dinero. Aquellos que manejan o manejaron grandes sumas en B ya disponen de circuitos alternativos, opacos, eficientes y ajenos a la crisis financiera que tiene a la banca española al borde del rescate y al Gobierno de Rajoy más colgado que un jamón serrano puesto a secar. Para eso están los paraísos fiscales, desde Andorra La Vieja al Estado del Vaticano pasando por Gibraltar y la Suiza de toda la vida. La familia Botín tiene sus ahorros en cámaras acorazadas de Ginebra, y ya regularizó fiscalmente la jugada con la amable colaboración de Hacienda y la Fiscalía. En cuanto a los listos que atesoran en casa unos miles de euros, ¿para qué habrían de sacarlos a la luz exponiéndolos a jugarretas bancarias, comisiones y corralitos? En este país hasta los sinvergüenzas se muestran escépticos. Bueno... ellos más que nadie. Saben de qué va.

José Luis Trasobares 05/06/2012

lunes, 4 de junio de 2012

Falsos argumentos 'liberales' 20120604

Leí un artículo del economista Luis Garicano (una de las voces liberales más escuchadas) en el que arremetía contra los excesos de regulación que, según él, atenazan a la economía española. Partía de un ejemplo curioso: el supuesto convenio colectivo de una empresa del sector de la información que prohibía a sus redactores ejercer funciones correspondientes a fotógrafos o cámaras. Un contradiós en estos tiempos de multimedia digital. ¿Cómo va a funcionar España si todo está tan reglamentado? ¿Cómo se buscarán la vida los emprendedores en esta jungla de normas, condiciones, licencias y permisos?

Estos argumentos tienen éxito, sobre todo cuando los dice alguien con autoridad que además se apoya en extrapolaciones llamativas. Pero en este caso resulta muy dudoso no solo el planteamiento básico sino la extrapolación. Tengan ustedes por seguro que si en España queda todavía algún diario que mantenga la estricta división de trabajo entre escribidores y proveedores de imagen será la excepción, no la regla. Eso es cosa del pasado y en todo caso jamás se aplicó a rajatabla. Otra cosa es que las empresas de cierta categoría dispongan de profesionales expertos en diferentes actividades informativas y cada uno haga lo que sabe hacer para hacerlo bien. Mas la onda que llega es la contraria: convertir al periodista en una especie de individuo orquesta que graba, filma, fotografía, escribe textos y hace todo tipo de maravillas por un sueldo miserable.

Pero la cuestión llega más lejos. No dudo de que las administraciones españolas forman un entramado demasiado complejo y en ocasiones paralizante. La burocracia puede causar estragos y de hecho los causa. Aunque explíquenme vuesas mercedes qué sería esto si no existieran normas y controles para garantizar al público que un emprendedor demasiado entusiasta no cree situaciones molestas o peligrosas para los demás, explote a sus empleados, utilice profesionales sin cualificar, dañe el medio ambiente, engañe a sus clientes, incumpla sus obligaciones fiscales o realice prácticas ilegales.

Y es que muchos argumentos liberales son a menudo simplistas y a veces evidentemente falsos.

Contaminación ética y medioambiental 20120602

Si esta ruina que nos agobia no tiene causas concretas ni culpables con nombre y apellido, es lógico que las medidas destinadas supuestamente a salir del pozo sean las mismas que nos hundieron en él. Así, cuando la costa española suma cientos de miles de segundas viviendas sin vender, la última ocurrencia es urbanizar la última playa virgen de Tarifa, las hermosas dunas de Valdevaqueros. ¿Malvados?, ¿estúpidos?... Las dos cosas. Aún buscamos en el ladrillo el Nirvana del dinero fácil y despreciamos la economía productiva. Hay imbéciles (y perdonen el desahogo) que se alegran cuando los gobiernos barrenan la Unviersidad y la investigación. Y al parecer estamos dispuestos a insistir en la destrucción de nuestro medio ambiente. Pero claro, ¿qué se puede pensar de un país cuyos más preclaros prohombres se jactan de guardar silencio sobre manifiestos robos y estafas a gran escala?

Hoy se celebra en Pina de Ebro una concentración para protestar contra la instalación en el polígono Los Royales de una factoría (por llamarla de alguna manera) que reciclará treinta mil toneladas de baterías al año e incluirá en sus instalaciones una fundición de plomo. Tal instalación ha sido declarada por el Gobierno aragonés "de interés autonómico" y se sumaría a otra que la misma empresa (Recobat SL) tiene en Albalate del Arzobispo.

Está claro que los jefes de la Tierra Noble no han aprendido nada de casos como el de Inquinosa, que se fue cuando quiso de Sabiñánigo y dejó tras de sí cantidades ingentes de venenoso lindano cuyo control ha costado al erario público decenas de millones de euros. O el de la química Virval, que ha regalado a Zaragoza un impresionante cargamento de mierda sin que el Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de la inmortal ciudad llegaran a enterarse. Hemos tenido el honor de producir muchísimo más cemento del que consumimos; ahora estamos a un paso de albergar el reciclado de sesenta mil toneladas de baterías usadas cuando aquí sólo producimos cuatro mil.

Contaminada la ética institucional y contaminado el medio ambiente, está claro que no sabemos resolver esta crisis pero ya preparamos la siguiente. 

viernes, 1 de junio de 2012

Por encima y por debajo de la red 20120601

La tupida red de la impunidad funciona de manera parecida a una que ponían en el Fabuloso Circo Americano. Extendida de lado a lado de la pista, evitaba que los raudos trapecistas sufrieran daño alguno si caían en medio de algún salto mortal. Izada por su centro con una polea cubría la jaula de las fieras amaestradas e impedía que pudieran escaparse. Pongan volatineros financieros y políticos en las alturas de la carpa, imaginen que tigres y leones encarnan a la opinión pública obligada a pasar por aro y tendrán la imagen completa del Gran Circo Español, el privilegiado lugar donde es posible vaciar entidades financieras, disimular el saqueo mediante contabilidades falsas, traspasarle el muerto al erario público y salir de rositas por la puerta principal con una indemnización o fondo de pensiones multimillonarios.

Esa red no se tejió en cuatro días. Para urdirla fue menester darle la vuelta a democracia, trucar la vida de las instituciones y falsear la realidad. Todo lo cual se hizo, desde luego, con la complicidad de quienes debían haberlo evitado: partidos, sindicatos, patronales... La izquierda oficial quería entrar en el Sistema y disfrutar de sus beneficios. La derecha estaba a lo que estaba. Unos accedían a recalificar suelo al dictado de los cárteles inmobiliarios, otros arrimaban al interés de sus amigos o mentores la privatización de los monopolios públicos, otros más se dejaban querer en los consejos de administración. Genial, ¿verdad? Corría el dinero. Se fraguaban estupendos pelotazos. Hubo algún escándalo, es verdad. Sobre todo cuando el pillado en falta era algún descamisado que se había pasado de rosca. Pero pronto los jueces empezaron a tomarse la cosa con calma (sobre todo si debían imputar a personajes de auténtico tronío), los medios se pusieron a caminar con pies de plomo (mientras la filtraciones sustituían al verdadero periodismo de investigación) y la ciudadanía se dejó seducir por los fuegos artificiales de la política de escaparate, navajeo y martingala. Los grandes promotores-constructores amasaban fortunas. Los paraísos eran fiscales. Los banqueros se frotaban las manos.

Ha venido la crisis. Y la red aguanta. La impunidad está garantizada.

JOSÉ LUIS Trasobares 01/06/2012