En Madrid se libra una batalla de importantes repercusiones
estratégicas. La resistencia de los profesionales de la sanidad pública a
los planes privatizadores del Gobierno autónomo simboliza y resume la
pugna en torno a un servicio cuya actual devaluación presagia un
derrumbamiento a medio plazo de consecuencias catastróficas. Además, el
escenario de la pelea permite contemplarla con claridad, sin
distracciones. Porque aquella comunidad autónoma viene siendo gestionada
desde hace diez años por el mismo partido (el PP, por supuesto). Allí
no hay herencias que valgan.
Madrid es Madrid y Aragón su
sucursal. En la Tierra Noble, los trabajadores de la sanidad pública
también resisten e intentan afrontar los sucesivos torpedos que la
consejería del ramo lanza contra toda la estructura asistencial. El
incontrolado aumento de las listas de espera, la reducción de plantillas
o decisiones tan obviamente destructivas como la concentración de
análisis en un único laboratorio (cuya posterior externalización
se da por hecha) solo pueden tener un objetivo. Añádanse a ello medidas
de carácter general como el copago de ambulancias y medicinas, las
presiones a los médicos para que aceleren el alta de los pacientes hospitalizados, las restricciones en la atención primaria... Es el acabose.
En sólo un año, Rajoy
y los suyos han deshecho lo construido durante lustros. Y está claro
que van a seguir en ello. En Madrid o en Aragón la consigna de los jefes
es aguantar las protestas y seguir adelante. Tan claro lo tienen que
aquí fueron capaces de nombrar gerante del Salud a un personaje como Tenza
que ya venía de Burgos denunciado e imputado por acoso y prevaricación.
Finalmente han tenido que disponer su relevo (después de que el fiscal
pidiera para él seis meses de prisión y doce años de inhabilitación).
Mientras, este personaje ha estado aplicando con mano de hierro los
recortes, actuando como mano derecha del consejero Oliván.
Van a desguazar la sanidad pública española, una de las mejores y más
baratas del mundo. Pero... ¿de dónde ha salido esta gente?
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