Por falta de un millón de euros (sí, un simple milloncico), Calamocha se quedó sin matadero, lo cual ha partido por el eje a la ganadería y la industria cárnica de la zona. A cambio, el alcalde de la localidad, Joaquín Peribañez (PAR), apareció con unos señores que iban a montar allí una fábrica de luminarias LED: treinta y dos millones de inversión y ciento veinte puestos de trabajo. La gente se lo creyó, claro. Acostumbrada a los brindis al sol y a las más surrealistas invenciones, la opinión pública aragonesa se traga las patrañas a todas las escalas, grandes o pequeñas. Así que los calamochinos votaron a Peribañez para que siguiera en el machito. Pero de la fábrica nunca más se supo, Bueno, sí: se supo que era una trampa, una quimera, una mentira, un cebo electoral, un montaje.
Esto de que los jefes nos echen por delante liebres de trapo, que nosotros perseguimos afanosos cual galgos en el canódromo, es una enfermedad crónica. Ahora mismo, vamos tras la fabulosa e inalcanzable TCP mientras la gente sigue muriendo en la N-232 o la N-II porque no supimos aprovechar los años de bonanza para conseguir algo tan sencillo como el desdoblamiento de sus tramos aragoneses. Y todavía escuchamos a los consejeros de Rudi prometer con indescriptible seriedad que buscarán un apaño para el aeropuerto de Huesca o una empresa-milagro que gestione el aeródromo de Caudé. El dinero que falta para mantener en marcha servicios o actividades reales y esenciales se gasta en mantener vivas auténticas fantasmadas. ¡Y el tiempo que se pierde desentrañando laberintos! Figúrense que sólo para poder conocer el contenido del supercontrato firmado entre la sociedad pública Motorland y Dorna, la organizadora de los GPs de motos, han sido precisos sucesivos debates en las Cortes amén de un informe jurídico emitido por los expertos de la misma Cámara. Es impresionante.
El caso es que Aragón aún tiene una enseñanza pública y una Universidad y un sistema sanitario de verdad. Pero nuestro Gobierno, alucinado perdido, está empeñado en que también evolucionen hacia la ficción y la mentira. Esto va a ser puro cartón piedra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario