De repente, cuando los socialistas ya daban la cosa por hecha, Echenique
convocó una rueda de prensa y vertió un jarro de agua fría sobre las
negociaciones con el PSOE (en el ámbito autonómico). Así que el tema
anda medio bloqueado o pendiente de nuevos contactos o a la espera de
que ambas partes (más CHA más IU, imagino) limen sus diferencias, que en
algunos casos se deben a sutiles matices retóricos. Quizás haya también
cuestiones de fondo, pero muchas de ellas parecen tener una dimensión,
llamémosla discursiva, que se escapa de la realidad concreta para
ascender al limbo de lo espiritual. Ahí, el líder de Podemos- Aragón,
personaje singular al que miman los medios nacionales (¡gran logro para
un político aragonés!), se mueve como pez en el agua. Tal vez porque
fuera de él (o sea, en tierra firme) su limitado conocimiento de la cosa
pública (que intenta incrementar a toda velocidad) le dejaría
asfixiado. Luego está Lambán, que según me malicio aún pretende formar
un Ejecutivo según los viejos cánones, lo cual incluye la consabida
negociación intra-PSOE para determinar qué le toca a cada una de las
familias del partido. En fin, a lo mejor hoy mismo, o mañana, a unos y a
otros les entra un ataque de lucidez o un arrebato de necesidad y todo
se arregla.
Retransmitir las negociaciones por streaming está bien. Pero con eso no basta. Es importante hacer propuestas claras y operativas, superar rápidamente las inútiles declaraciones de principios e informar cumplidamente a la ciudadanía de todo ello. Y de los acuerdos que se alcancen, claro.
El método para negociar, los interlocutores, los asesores técnicos, las coincidencias programáticas o la intención de cada parte deberían haberse anticipado a las propias elecciones. Lo mismo que la obvia relación entre las conversaciones y acuerdos en el nivel municipal y los correspondientes al autonómico, pues ayuntamientos, diputaciones y Gobierno de Aragón están obligados a trabajar conjuntamente. De esa forma los votantes entenderían mejor los actuales acontecimientos y todo iría más fluido. Si no es mucho pedir.
Retransmitir las negociaciones por streaming está bien. Pero con eso no basta. Es importante hacer propuestas claras y operativas, superar rápidamente las inútiles declaraciones de principios e informar cumplidamente a la ciudadanía de todo ello. Y de los acuerdos que se alcancen, claro.
El método para negociar, los interlocutores, los asesores técnicos, las coincidencias programáticas o la intención de cada parte deberían haberse anticipado a las propias elecciones. Lo mismo que la obvia relación entre las conversaciones y acuerdos en el nivel municipal y los correspondientes al autonómico, pues ayuntamientos, diputaciones y Gobierno de Aragón están obligados a trabajar conjuntamente. De esa forma los votantes entenderían mejor los actuales acontecimientos y todo iría más fluido. Si no es mucho pedir.
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