Las europeas han sido consideradas siempre un ejercicio político
menor en el que (aparentemente) casi nada estaba en juego. Pero estas de
ahora van a levantar pasiones inéditas hasta hoy. Porque en estas,
amigos, no solo flotará una atmósfera distinta, tras haber comprobado
que en la UE se decide nuestro presente y nuestro futuro; además, se van
a convertir en un test cargado de interés, de importantes consecuencias
y de morbo. Ahí se comprobará cuál es la nueva correlación de fuerzas y
ahí se medirá la influencia de cada cual, antes de que las elecciones
autonómicas y municipales y las generales determinen para quién es el
poder.
En las europeas que vienen el catálogo electoral semeja un superbocata
de esos que suman pisos cuyos ingredientes pelean entre sí para imponer
su sabor: el queso contra la hamburguesa, el jamón de york contra el
huevo a la plancha, la lechuga contra el ketchup. En el caso que nos
ocupa, la fragmentación y la aparición de segundas o terceras opciones
en cada espacio ideológico creará una nueva tensión más allá del
habitual pulso entre los dos grandes (que ya veremos cómo de grandes se
quedan después de mayo). Nadie puede estar tranquilo. Al PP le empuja
por la derecha Vox (cuyo lanzamiento ha sido todo un éxito) y por el
flanco nacional-liberal o nacional-nacional (españolista,
claro), Ciutadans y UPD. Esta misma formación empuja al PSOE con una
apuesta jacobina, que presiona a un socialismo desgarrado también por
las tentaciones cuasicentrífugas en la periferia. Sin olvidar, claro, la
opción que siempre recoge los votos que abandonan el socialismo por su
izquierda: IU. Claro que dicha coalición va achuchada a su vez entre
Podemos, las CUT catalanas y un grupo de nuevas formaciones capaces de
enganchar a los votantes jóvenes como Equo o el Partido X. Algunos de
los citados no pasarán de ser irrelevantes estrellas fugaces. Otros...
Bueno, partiendo de la base de que un asiento en el Europarlamento sale
por 200.000 o 250.000 (dependerá de la participación), a lo mejor no
todos se estrellan.
(Continuará).
No hay comentarios:
Publicar un comentario